El pasado domingo 19 de junio, docentes mexicanos nucleados en la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) fueron brutalmente reprimidos por la policía federal y provincial en el Estado de Oaxaca, México, mientras se manifestaban contra la reforma educativa impulsada por el gobierno del presidente Peña Nieto.
La represión fue una masacre: 12 compañeros muertos, centenares de heridos, a los que se les suman decenas de detenidos y 22 desaparecidos.
La CNTE tiene alrededor de 200 mil afiliados en México, 80 mil de ellos en Oaxaca, y es uno de los gremios latinoamericanos que durante años ha mantenido su lucha por mejores reivindicaciones y beneficios sociales.
Lamentablemente este episodio no fue un hecho aislado, sino que forma parte de una política sistemática de represión y persecución impulsada por el gobierno nacional que busca amedrentar y acallar las voces del pueblo. La represión y la violencia policial es la contra cara de la violencia institucional ejercida desde el gobierno con medidas que socavan los derechos de los trabajadores , como la reforma educativa de 2013 impulsada por el presidente Peña Nieto, que abre la puerta al despido de miles de trabajadores docentes.
Los docentes organizados en la CNTE vienen resistiendo a esta reforma, y ya han sido más de 4000 los maestros despedidos en represalia a la participación en diferentes movilizaciones y actos por oponerse a dicha reforma. El domingo 19 de junio continuaron las protestas contra la reforma y por la liberación de los dirigentes que están siendo detenidos producto de la criminalización de la protesta que tiene como objetivo silenciar las voces disidentes y populares y fue en ese momento que policías fuertemente armados cometieron la masacre, hirieron a centenares de persona y detuvieron a varios compañeros. Desde la CNTE denuncian que 22 compañeros y compañeras se encuentran desaparecidos luego de la represión, que obliga tristemente a recordar a los 43 estudiantes de Ayotzinapa que aún siguen desaparecidos.
Desde la Secretaría de Relaciones Internacionales de la CTA-Autónoma, repudiaron la brutal masacre al tiempo que se solidarizaron con los compañeros de la CNTE. “ Argentina está con el pueblo mexicano, para apoyar sus reivindicaciones, y para sobre todo, denunciar y condenar la violencia estatal que es una pata clave de la política privatizadora y neoliberal del gobierno de Peña Nieto” , expresó Adolfo “Fito” Aguirre, Secretario de Relaciones Internacionales