El 9 de septiembre de 1976 fallecía el camarada Mao Tsetung, presidente de la República Popular China.
La línea de Mao
¿Cuál era la línea de Mao? La línea de hegemonía proletaria en la revolución agraria y antiimperialista de liberación nacional. Esa línea triunfó en el país más grande, más poblado de la tierra. Es una línea que atiende a los problemas claves de la revolución, de la Revolución de Nueva Democracia, y quien quiera verdaderamente llevar al triunfo esa revolución debe estudiar esa experiencia.
Hay que decir que para hacer la revolución los revolucionarios tienen que estudiar el arte militar. Está bien estudiar economía, pero también hay que aprender a manejar, si se puede, un mortero. El más grande teórico de la guerra revolucionaria, no superado, fue Mao Tsetung. Los comunistas cubanos aplicaron esta experiencia en Cuba. Al lado de Raúl Castro, que ya era afiliado al Partido Socialista Popular estaba un dirigente de ese Partido que había estudiado minuciosamente la experiencia china, experiencia que se aplicó en detalle en el frente de Mayarí y en Las Villas. Esa experiencia de apoyarse en las masas, de tomar prisioneros y no fusilar al enemigo, darles buen trato y adoctrinamiento, y mandarlos de vuelta, etc., etc., está muy bien reflejada en un video que recomiendo ver a los que no lo han visto, sobre el Che Guevara. Porque el Che Guevara, en su alforja revolucionaria, es decir en su mochila, tenía tres trabajos: un trabajo que se editó en Moscú sobre La guerra de guerrillas, con trabajos de Marx, Engels, Lenin y Stalín; El Estado y la revolución de Lenin y la Guerra de guerrillas de Mao Tsetung. También él aplicó a fondo la experiencia de la revolución china, y entiendo que es una de las causas por las que la revolución cubana triunfó.
El aporte filosófico de Mao Tsetung
Mao Tsetung hizo un gran aporte –como decíamos antes– enriqueciendo la teoría filosófica del marxismo-leninismo. El dijo que su trabajo preferido era Acerca de la práctica. Esta obra desarrolló las tesis de Marx y de Engels. Y aquí en la Argentina, donde nuestro carácter de país dependiente se ha manifestado, en lo cultural, con el triunfo fácil de las modas burguesas, sobre todo las originadas en París, padecimos la peste althusseriana que extravió a muchos marxistas. Por eso valoramos especialmente el trabajo de Mao Acerca de la práctica. Es indudable también la importancia de su trabajo Sobre la contradicción…
Para Mao –igual que para Lenin– la dialéctica es “la doctrina acerca de la unidad de los contrarios”. Para Mao: “uno se divide en dos” (al retomar una expresión taoísta ampliamente conocida en China facilitó que millones de chinos hiciesen suyo el método dialéctico de análisis). “Uno se divide en dos” y no como afirman los revisionistas que “dos confluyen en uno”, porque esto último subraya el momento de la síntesis, al igual que hizo Hegel. Porque la negación de la negación en Hegel conserva lo que ha sido negado. Esto, que es válido en algunos procesos, no lo es en el proceso revolucionario.
Este nuevo sistema “exige la destrucción de lo anterior”, porque como dice Mao “la construcción sin destrucción no existe”. Lo que no quiere decir que se destruyan los elementos anteriores, sino la forma en la que se combinan o reproducen. Por eso la contrarrevolución, luego del triunfo de la revolución, es posible. La línea cultural maoísta, a diferencia de la soviética, grafica bien este tema de la dialéctica maoísta. Y la línea maoísta respecto del problema clave del Estado (la relación masas-partido-Estado) también.
Para Mao “todas las contradicciones son irreconciliables”, pero “algunas son antagónicas y otras no”. Y como ustedes saben diferenció dos tipos de contradicciones sociales: “entre nosotros y el enemigo” y “en el seno del pueblo”. La primera es antagónica y entre las segundas algunas no lo son (las que existen dentro de las masas trabajadoras) y otras (por ejemplo, entre las clases explotadas y sectores de las clases explotadoras que pertenecen al pueblo en diferentes momentos revolucionarios) tienen un aspecto antagónico y otro no. Para la dialéctica de Mao, igual que para Marx y para Lenin, en la contradicción equilibrio desequilibrio el desequilibrio es el aspecto absoluto y el equilibrio es relativo. Esto es lo primero que se revisó de Mao, a su muerte, cuando triunfó el sector revisionista de Teng Siao-ping.
También Mao desarrolló la doctrina marxista desde el punto de vista de la teoría económica. Yo quiero decir esto porque los revisionistas divulgaron la idea de que Mao era una especie de analfabeto en economía. Mao en 1933 hizo la ley agraria de la zona liberada en China. Cuando triunfó la lucha antijaponesa, alrededor del ‘45, dirigían zonas con cien millones de habitantes. Sin embargo Mao dijo después de esto: “nosotros no teníamos experiencia de dirección nacional y tuvimos que seguir la experiencia soviética”. Experiencia que luego reemplazaron por su propia línea.
La gran revolución cultural proletaria
Sobre el otro gran tema ¿es posible terminar con la explotación del hombre por el hombre? ¿El derrocamiento de la burguesía y la dictadura del proletariado puede llevar a la humanidad a una sociedad de tal tipo, comunista, o inexorablemente llevará a las deformaciones y a la degeneración a las que llegó en la Unión Soviética y en China? Mao, en la Revolución Cultural Proletaria, dio respuesta teórica y práctica a esta cuestión.
A principios de los años ‘60 se desplegaba en China la lucha contra el revisionismo. Este se había impuesto en la URSS en el 20º Congreso en 1956 y en la patria del socialismo se había restaurado el capitalismo. En China los revisionistas habían impuesto su hegemonía y sus tesis en el 8º Congreso en 1956. Luego los revolucionarios contraatacaron apoyándose en el gigantesco movimiento de masas que llevó a quinientos millones de chinos a las comunas populares con el Gran Salto Adelante. Pero las catástrofes naturales, el boicot soviético y los errores izquierdistas que se cometieron y que la propia derecha empujó en su momento –empezando por Liu Shao-chi– permitieron a su vez a la corriente oportunista de derecha y revisionista contraatacar. Hubo una aguda lucha de líneas en el Partido Comunista de China. La lucha llevó a la necesidad de profundizar en las raíces sociales y políticas del revisionismo, investigar por qué surgen elementos como Jruschov, Breznev, de origen proletario, educados por el Partido, que en un proceso se transforman en seguidores del camino capitalista y se emboscan en la dirección trabajando para la restauración burguesa como sucedió en la Unión Soviética, y luego en China.
¿Producto de qué y por qué sucede esto? Ateniéndose al marxismo, en oposición al idealismo, Mao sostuvo que el revisionismo de Jruschov no era el producto de una mera individualidad negativa, que debían investigarse las contradicciones entre la base económica y en la superestructura para descubrir las raíces objetivas y subjetivas del revisionismo, y llegó a sintetizar la teoría de la continuación de la revolución en las condiciones de la dictadura del proletariado. Brevemente, esta teoría está basada en la comprensión de que la sociedad socialista abarca una etapa histórica bastante prolongada, y en ella hay consonancia y contradicción simultánea entre las relaciones de producción y las fuerzas productivas y entre la superestructura y la base. En determinado momento el aspecto principal es la contradicción. A lo largo de toda esta etapa existen clases, contradicciones de clase, lucha de clases, existe la lucha entre el camino socialista y el capitalista, existe el peligro de la restauración del capitalismo y existe la amenaza de subversión y de agresión por parte del imperialismo.
Sintéticamente: Mao concluyó que es necesario persistir en la lucha entre el proletariado y la burguesía; que, bajo la dictadura del proletariado esta lucha se expresa fundamentalmente en la lucha entre los marxistas-leninistas y los revisionistas, entre los que defienden la dictadura del proletariado y los seguidores del camino capitalista dentro del Partido, etc.
Consideramos la teoría de la continuación de la revolución en las condiciones de la dictadura del proletariado de Mao, y la Revolución Cultural Proletaria, como el punto máximo de avance de la teoría y el movimiento revolucionario proletario desde su inicio.
Hoy el proletariado ha perdido el poder en los países donde lo había conquistado, pero no volvimos al punto de partida. Atesoramos un gigantesco bagaje de experiencias producto de la lucha revolucionaria de la clase obrera mundial durante dos siglos y tenemos certezas teóricas. Estas nos confirman la validez universal de los problemas fundamentales de la doctrina científica de Marx, Engels, Lenin, Stalin y Mao y la justeza de la lucha por la dictadura del proletariado a escala mundial. No luchamos por una utopía, es decir, no luchamos por un objetivo inalcanzable.
En relación con esto y afirmando esas certezas hemos dicho que el proletariado debe estudiar las conquistas y la derrota de la Revolución Cultural Proletaria. Así como Marx y Lenin estudiaron el triunfo y la derrota de la Comuna de París y la revolución rusa de 1905. Y sostenemos, por otro lado, que no podemos imaginar las formas concretas que tendrán las sociedades en las que el proletariado conquistará el poder aunque sí sabemos que su esencia será la dictadura del proletariado.