En el marco del paro de 36 horas que protagoniza la CTA en unidad de acción con otras centrales sindicales y organizaciones del campo popular, se realizó una masiva concentración frente al Cabildo para marchar al Congreso Nacional. Un grupo de dirigentes fue recibido por diputados a quienes se les entregó el pliego reivindicativo de la jornada de lucha
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Desde las 14 comenzaron a concentrar trabajadores y organizaciones que llegaban luego de haber protagonizado los distintos cortes y actos en el área Metropolitana, confluyendo en las puertas del Cabildo. Con los bombos al frente, avanzaba la movilización de miles de trabajadores a través de Avenida de Mayo.
La multitud reclamó la urgente sanción una ley que prohíba los despidos y suspensiones por un año, la derogación del impuesto al salario, el cese de la precarización laboral, el desprocesamiento de todos los luchadores sociales, el 82% móvil para todos los jubilados y pensionados, la suspensión del pago a los organismos internacionales mientras se investigan el origen de esa deuda fraudulenta, entre otras demandas históricas.
Hacia las 16 horas, las columnas arribaron al Congreso Nacional, donde una delegación integrada por compañeros de las organizaciones convocantes, fue recibida por un grupo de diputados a quienes se les entregó el pliego reivindicativo del paro de 36 horas.
Al frente de la locución del acto, Juan Carlos “Pipón” Giuliani destacó la exitosa jornada de paro con cortes porque: “la fuerza de la organización de los trabajadores es imparable”. También resaltó el paro que llevará adelante la Unión de Conductores de la República Argentina (UCRA-CTA) en 22 provincias, aunque la UTA haya decidido no plegarse a la medida, con lo cual «va a ser muy importante la adhesión de los conductores de corta, media y larga distancia».
Junto con Pipón, la compañera Giselle Santana, Secretaria General por la Regional Norte de CTA Capital, nombraron a todas y cada una de las organizaciones, agrupaciones y juntas internas que se encontraban presentes en el acto a la vez que recordaban los principales puntos de la jornada de lucha. Además se auguró una contundencia rotunda hacia el paro del jueves 28.
Unidad de acción para frenar el ajuste
En primer lugar, hizo uso de la palabra un compañero de la junta interna de LEAR: “Hemos desarrollado una lucha para dar respuesta a todos los trabajadores que enfrentan suspensiones y despidos en las empresas”, resumió el delegado al tiempo que recordó las peleas que llevan adelante los trabajadores de EMFER, TATSA y Donneley.
Por el movimiento Barrios de Pie, habló a la multitud Daniel Menéndez: “desde nuestro movimiento es un honor acompañar esta jornada de lucha de 36 horas en todo el país. Acompañamos la pelea de la clase obrera ante la recesión y el ajuste. Para quienes estamos sin un trabajo estable, este es el camino hacia un país más justo y soberano”.
Juan Alderete se refirió en nombre de la Corriente Clasista Combativa: “Estamos dando cumplimiento al paro convocado por la CTA y la Multisectorial”. El dirigente destacó la presencia de los distintos Pueblos Originarios en las marchas de todo el país, de los estudiantes, de los campesinos, etcétera. “Lo fundamental en nuestro país es que hay recesión y eso se ve en la inflación que llevó a la pérdida de muchos puestos de trabajo en lo que va del año. Por eso los trabajadores desocupados vamos a estar haciendo piquetes en todo el país, junto a otros trabajadores. Y si este paro no alcanza, seguiremos en la calle”, resumió Alderete.
A su turno, por la Corriente Sindical Clasista se dirigió Marcelo Ramal, legislador del Partido Obrero quién celebró el comienzo del paro nacional activo: “Es un paro que empezó hace mucho. Es el paro que reclamó Gestamp, Lear, los azucareros del norte, los trabajadores de Donneley, los de los frigoríficos que cerraros, los docentes, de la extraordinaria huelga de docentes universitario de Tucumán. Este paro lo hemos reclamado en tantas jornadas de lucha del último tiempo, por eso es total”. Y en respuesta al gobierno que sugiere que los piquetes impiden la «libre elección» de los trabajadores ante el paro agregó «hacemos piquetes para garantizar el derecho de huelga, porque en un 70% de las empresas no hay delegados y no pueden parar aunque quieran».
Luego fue el momento de Vilma Ripoll, quién tomo la voz en nombre del Movimiento Socialista de Trabajadores: “Esta semana, el Gobierno ha cambiado nuevamente de actitud, ha vuelto con el doble discurso para descargar el ajuste sobre los trabajadores. Tenemos que enfrentar ese doble discurso porque sigue la inflación, la precarización y la criminalización. Queremos una Ley que prohíba los despidos y las suspensiones, que se repartan las horas de trabajo entre los compañeros y que cada empresa que cierre, sea estatizada y controlada por los trabajadores”.
Una central de masas para la liberación
Por último, hizo uso de la palabra Pablo Micheli, Secretario General de la CTA, resaltando el análisis que hicieron los demás compañeros y valorando los diagnósticos similares más allá de las organizaciones que integra cada dirigente.
Micheli se refirió a una pregunta constante entre los periodistas los últimas días, que tiene que ver con la razón del paro si el Gobierno hace oídos sordos y no va a llamar a ninguna reunión: “Es porque queremos hacer temblar a las clases dominantes, porque se asustan cuando ven a la clase obrera organizada. Ellos están tan preocupados que intentan demonizarnos como clase, diciendo que nos bancan los fondos buitres”.
“Pobres son quienes no van al paro, son unos verdaderos cago.nes que han sido cooptados por este Gobierno y eso es una vergüenza”, dijo Micheli a la vez que recordó la letra del poeta Raúl González Tuñón que dice “cuando se escriba la historia, que se sepa que no estuvimos de acuerdo”, “Y para eso hay que salir a la calle, no se va a saber que no estamos de acuerdo si nos quedamos adentro”, agregó el líder de CTA Nacional.
Además, el Secretario General de la Central recordó una consigna del 2001 que debe ser retomada en esta etapa: “fábrica que se cierra, fábrica que se toma, porque no vamos a dejar a más compañeros y familias en la calle”.
También se refirió al encuentro que tuvieron minutos antes con Diputados Nacionales: “nos recibió una treintena de diputados, todos los presidentes de bloques menos los del oficialismo K y los del Pro, que son lo mismo. Allí planteamos todas nuestras reivindicaciones”.
“A nosotros jamás nos van a ver retroceder ante el imperio, ni un paso atrás, ni siquiera para tomar impulso. Por eso no debemos pagarle ni un centavo a los Buitres ni a ningún organismo internacional. Nos importa un carajo el bloqueo y el default. Latinoamérica tiene suficiente para no depender de ningún imperio. Hacer patria es ser soberanos”, dijo Micheli a la vez que era aplaudido por la multitud de trabajadores.
El dirigente de la Central criticó la alianza que existe entre la burocracia sindical, la patronal y el Gobierno: “actúan en conjunto para destruir todo frente de lucha. Por eso nosotros también tenemos que actuar en unidad, dejando de lado las diferencias y así poder construir un movimiento de masas”.
Finalmente resaltó los fundamentos de la unidad de acción para frenar el ajuste: “Tenemos que juntarnos para construir ofensiva y esa convicción está sólo en nosotros. Nosotros como CTA queremos estar en todos los conflictos, pero no queremos estar solos sino con todos los sectores del campo popular. Fuerza Compañeros”.