El Mercosur cumplió veinte años. Pero para la Coordinadora de Centrales Sindicales del Cono Sur (CCSCS), la «integración es aún muy débil, con poquísimos avances en el campo social y productivo”.
El Mercosur cumplió veinte años. Pero para la Coordinadora de Centrales Sindicales del Cono Sur (CCSCS), la «integración es aún muy débil, con poquísimos avances en el campo social y productivo”, así lo indicó en la carta que le entregó a los presidentes del bloque en la XLII Cumbre presidencial del Mercado Común Sur (Mercosur), que se realizó en Montevideo el 20 y 21 de diciembre pasado.
Paralelamente la CCSCS realizó su cumbre sindical. Por la CTA participaron Adolfo Aguirre, secretario de Relaciones Internacionales; Alejandra Angriman, de Género; e Inés Barboza, directora de Internacionales.
Para la CCSCS es necesario enfrentar la crisis financiera internacional con políticas estatales direccionadas “a la manutención del empleo y al fortalecimiento de la integración productiva con sustentabilidad ambiental e social”.
El movimiento sindical del cono sur dice que la salida debe ser «una fuerte regulación estatal sobre los sistemas financieros para ubicarlos como sustento de la actividad productiva y el desarrollo»; controlar y fijar impuestos a la actividad finaciera; fortalecer y ampliar el alcance y los objetivos del FOCEM (Fondo de Convergencia Estructural del Mercosur) y elevar los niveles de protección social y laboral, garantizando que la reforma de la Declaración Sociolaboral esté en sintonía con el grado de integración del mercado de trabajo en el Mercosur.
También implementar políticas que promuevan el trabajo decente en los países del bloque y promover políticas activas de género, juventud y migración.
En cuanto al desempeño del Mercosur, los sindicatos de la región señalan que Argentina y Brasil adoptan medidas arancelarias de protección frente a terceros mercado, sin resguardar a los socios menores, que se establece de esa forma un escenario que no prepara al bloque para el enfrentamiento de otro gran desafio: el relacionamiento comercial y económico con China, el mayor socio comercial de Brasil y el segundo para Argentina y Uruguay.
“El Mercosur, tiene dificultades de orden comercial y social, por lo cual debe encarar también el desafío de promover una reforma institucional que aún no avanzó”, afirmaron desde la CCSCS en la carta a los Presidentes. Y agregan que existen centenas de organismos (Subgrupos, Comisiones, Sub Comisiones, Grupos de Trabajo, Reuniones Especializadas, Foros de Consulta (políticos y sociales), aunque muchos están vaciados, y por eso “es voz corriente que la estructura institucional del MERCOSUR está cada vez más pesada e inoperante”.
“La integración exclusivamente económica y comercial provoca la reducción de la soberanía de los Estados Nacionales; la integración político-democrática implica la construcción de organismos de decisión comunitarios, que fortalezcan y legitimen el proceso”, añadieron.