Durante los días 13 y 14 de julio se celebró una nueva reunión plenaria del FCES del Mercosur a cargo de la coodinación pro-tempore de la Seccion Nacional Brasileña en la CNC ubicada en Brasilia.
En el marco de la participación en forma asidua de la CTA – Autónoma en la sección nacional del Foro Consultivo Económico-Social del Mercosur, Carlos Custer y Gonzalo Manzullo, delegado y delegado alterno para el Foro, respectivamente, participaron de la reunión plenaria regional del FCES componiendo junto a otras centrales y representantes del sector empresario la representación de la Sección Nacional Argentina del FCES.
También estuvieron presentes representantes de las Secciones Nacionales de Paraguay, Uruguay y Brasil, además de los encargados de la coordinación pro-témpore en el caso de este último país.
Una de las principales novedades de la reunión fue la reconstrucción y reincorporación de la Sección Nacional Paraguaya, en este caso representada solamente por el sector cooperativo, a las reuniones del FCES.
En cuanto a la agenda de la reunión, se debatió la situación actual del Mercosur a partir de un intercambio de perspectivas de las distintas secciones nacionales presentes.
En ese mismo marco y asistidos por los informes de los Embajadores Antono Simoes y Ronaldo Costa, se trató el avance de las negociaciones MERCOSUR-UE. En consonancia con esta temática, el FCES acordó emitir una recomendación que aboge en favor de un acuerdo equilibrado, mutuamente beneficioso y que favorezca el desarrollo integral de los pueblos.
Desde la CTA – Autónoma consideramos fundamental evitar que se concrete un acuerdo orientado al predomino de los beneficios de las inversiones de las empresas multinacionales, que sometan la capacidad de los estados de llevar adelante políticas públicas que pueden afectar las «ganancias» empresariales. Es imprescindible para la consecución de un acuerdo MERCOSUR-UE la participación y el constante diálogo con los movimientos populares y organizaciones de la sociedad civil, la transparencia para que no se lleven adelante acuerdo «de espaldas» a los pueblos, como está sucediendo con las cláusulas secretas del TISA.
Otro de los ejes a tener en cuenta es lograr una efectiva articulación política al interior de ambos bloques, para llegar a una postura unificada, que se sitúe en perspectiva de los cambios políticos y económicos que han tenido lugar desde que hace diez años atrás comenzaron las negociaciones entre los bloques regionales. Se hace necesaria una actualización institucional que permite llevar adelante con éxito las tareas y desafíos que el MERCOSUR se propone para la integración política, comercial y socio-cultural. Por eso celebramos la inminente adhesión de Bolivia al MERCOSUR, la incorporación de Venezuela como miembro pleno, así como las intenciones en la misma dirección de Ecuador,que constituyen un paso fundamental para avanzar en este camino de integración económica y productiva como uno de los pilares esenciales para construir nuestra soberanía regional.
Se decidió a su vez, favorecer las relaciones entre el FCES y el CESE, su par europeo, fomentando la cooperación entre ambos organismos.
Otro de los ejes de debate fue la obtención de un mayor financiamiento para el Foro, así como las perspectivas y evaluaciones respecto al funcionamiento efectivo del FOCEM, en vista a su probable renovación por un nuevo periodo a partir de 2016, indagando sobre el estado actual de ejecución de las obras y servicios que le fueron asignados.
Por otra parte, el Foro emitió una recomendación con el objeto de favorecer la implementación de la Nueva Declaración Sociolaboral del MERCOSUR, pronta a ser ratificada por los Jefes de Estado en la Cumbre del MERCOSUR y ya firmada por los Ministros de Trabajo de los países miembro. La CTA Autónoma participó de la redacción de la misma a través de su representante, el secretario Gremial Daniel Jorajuría. Consideramos que la NDSL que establece el piso mínimo de derechos laborales para los trabajadores de la región, resulta un paso fundamental en la construcción de ciudadanía para los trabajadores del Mercosur en pugna contra las tendencias a la informalidad y la precarización que aún hoy azotan al mundo laboral. Se constituye así como la respuesta política del MERCOSUR contra los avances patronales, la mercantilización del trabajo y como el combustible que permite continuar la lucha por una mayor justicia social. La NDSL prioriza al empleo como centro del desarrollo y al trabajo de calidad como verdadero ordenador social, recuperando las conquistas ya consignadas a través de las normas de la OIT.
Otra de las conquistas para el mundo trabajador que establece la Nueva DSL se refiere al Derecho de Huelga el Derecho que ha quedado intacto en esta Declaración. El artículo 18 de la misma establece además, que su regulación no puede impedir su ejercicio o desvirtuar su finalidad.
En último lugar, se analizaron y debatieron posturas conjuntas en torno al Plan Estratégico de Acción Social del Mercosur y el Estatuto de Ciudadanía del Mercosur.
* Equipo de Comunicación de la Secretaría de Relaciones Internacionales de la CTA